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La Mercedes-Benz Sprinter cuenta entre sus variantes con una interesante y no demasiado conocida versión de gas natural, un combustible con una presencia y relevancia creciente frente a las cada día más vilipendiadas mecánicas diésel. Nuestro protagonista cuenta con un motor que cubica 1.8 litros repartidos en cuatro cilindros alineados que alcanza a entregar hasta 156 cv a 5.000 rpm.
Esta es una de las peculiaridades que acompaña a la mecánica (que también puede funcionar con gasolina), su mayor régimen de trabajo frente a los diésel. Se trata de una diferencia de revoluciones que se pone ya de manifiesto en la zona de par máximo, pues esta Sprinter encuentra su rango de mayor rendimiento entre las 3.000 y 4.000 rpm. Acostumbrados a los turbodiésel OM651, que en su versión más modesta de 114 cv entregan un par motor de 300 Nm a partir de 1.200 rpm, es necesario “cambiar el chip” para valorar en su justa medida el potencial de este motor “gasificado”.
En definitiva, Sprinter propone con su variante de gas natural una alternativa a sus mecánicas diésel menos potentes, a las que vence con claridad por ser más respetuosa con el medio ambiente, pero de las que no se destaca significativamente en ahorro de combustible en base a los actuales y fluctuantes precios de los derivados del petróleo para el público genérico. En cualquier caso, la NGT es la apuesta más ecológica y económica de las actuales Sprinter.
Fuente: todotransporte.com[:]